Suecia e Inglaterra se jugaban el pase a semifinales de la Copa del Mundo. Los escandinavos rememorando el Mundial del 94, los ingleses tenían que rebobinar más la cinta para encontrar un momento similar, el del mundial de Italia 90. Al final, los dos goles de los ‘three lions’, catapultan al equipo de Southgate a esas semifinales y desbordan la euforia en toda Inglaterra, un país que vibra como pocos con el fútbol.
El equipo de Southgate tenía ante sí un manual de instrucciones para, no montar, sino desmontar un mueble. El equipo sueco se había mostrado con una fiabilidad y un saber hacer digno de mención. Sin duda, uno de los equipos más rocosos de este mundial de Rusia.
La pizarra del técnico inglés echó humo para conseguirlo, pero donde selecciones del nivel de Alemania, México o Suiza, no pudieron llegar, esta Inglaterra pudo.
Southgate abrió a los carrileros, Trippier y Young, al límite. Lamían la línea de cal constantemente lo que provocó que los laterales suecos no pudieran incorporarse al ataque, el cortocircuito entre los atacantes Toivonen y Berg con el resto del equipo estaba conseguido, y con ello, gran parte del pase a semifinales de los ingleses.
El encuentro empezó a ritmo lento, los equipos se tanteaban como si fueran boxeadores y no vimos demasiado juego. Tal es así, que la primera llegada tuvo lugar a los 10 minutos con un centro chut de Walker que Olsen detuvo con seguridad.
Inglaterra no proponía demasiado, pero los suecos, merced al acierto del técnico inglés, estaban desaparecidos en la faceta ofensiva. Solo Harry Kane, que hoy estuvo bastante desaparecido, se atrevió a probar suerte, pero su disparo se marchó desviado de la meta sueca.
El gol llegaría a balón parado o no llegaría… y llegó, corría el minuto 31 cuando a saque de esquina, Maguire remataba de cabeza un centro magistral para establecer el 0-1. Marcaba el otro Harry, el que no estamos acostumbrados a que lo haga.
La segunda mitad obligó a los escandinavos a dar un paso al frente y el partido comenzó con una marcha más. Ahí emergió uno de los protagonistas, Jordan Pickford. Apenas estábamos en el minuto 46, cuando el guardameta realizó una excelente parada al remate de Berg. Los suecos se estiraban y los ingleses intentaban matar el partido a la contra, pudieron hacerlo si Sterling no estuviera realizando un mundial tan gris.
Para ese instante, Henderson ya era el dueño y señor del encuentro. El centrocampista del Liverpool manejó el encuentro a su discreción.
Cuando llegábamos al minuto 58, un buen centro de Young, era rematado, de nuevo de cabeza, por Dele Alli para poner el 0-2 en el luminoso del Samara Arena.
En el minuto 61 Claesson tuvo otra gran ocasión para reducir distancias y en el 65, de nuevo Maguire daba la contra réplica para los ingleses.
Suecia no encontraba manera de hacer daño de manera contundente a Inglaterra, sólo en ocasiones deslabazadas, generalmente propiciadas por errores de concentración en la zaga, que eran solventadas una y otra vez por un Pickford sensacional.
No hubo tiempo para más, Inglaterra se clasifica para las semifinales de una Copa del Mundo por primera vez en 28 años y sueña con algo grande. Tienen motivos de sobra para ello.
Ficha técnica:
0 Suecia: Olsen; Karfth, Lindelöf, Granqvist, Augustinsson; Claesson, Larsson, Ekdal, Forsberg (Olson 62′); Berg y Toivonen (Guidetti 62′).
2 Inglaterra: Pickford; Walker, Stones, Maguire; Trippier, Dele (Delph 75′), Henderson (Dier 83′), Lingard, Young; Sterling (Rashford 90′) y Kane.
Goles: 0-1 Maguire 31′. 0-2 Dele 58′.
Árbitro: Kuipers (Holanda) amonestó a Larsson (93′) de Suecia.
Estadio: Samara Arena.